Macarena Márquez Jurado

En esa línea, ha realizado numerosas exposiciones, alternando su trabajo en una editorial de revistas de difusión nacional (G+J España, Cosmopolitan, Mía, Muy Interesante, Marie Claire, Ser Padres, Geo) con la actividad pictórica y literaria.Con ojo crítico, rigurosidad histórica y visión humorística, ambos excónyuges harán una incursión en el tiempo desde los albores del tercer milenio hasta llegar a lo que fue la infancia de los niños nacidos a fines del Franquismo, los Baby boomer españoles.Sus protagonistas son antihéroes que madrugan, trasnochan, tienen perfil en las Redes, cambian pequeños pisos en el centro de la urbe por adosados en los confines del universo, ven la televisión, padecen atascos, hacen la compra.Poco a poco, Cervantes le irá conquistando, hasta explicarle de forma clara y amena las peripecias por las que pasó en lo que hoy es la Casa de Cervantes (Valladolid).Por abajo, las palabras precisan aquello que un pincel no podría definir.Todo abunda en lo mismo: crear universo, detener ciertos instantes, nadar en ilusiones ópticas.La línea que separa su obra escrita de la pictórica es apenas imperceptible.Fiel reflejo de esa escasa diferencia entre el plano pictórico y el literario es la muestra: Visto para lectura (Madrid, 2001) en donde la visión plástica fue definida por textos de autores como James Joyce, Marcel Proust o Séneca.
Macarena Márquez Jurado