Si bien las críticas se realizaron generalmente para la novela completa, los comentarios que recibió «Ainulindalë» fueron positivos.Este hecho provocó una discordancia en la música e Ilúvatar se levantó sonriente, alzando la mano izquierda de forma que un nuevo tema comenzó a sonar.Algunos de los ainur permanecieron junto a Ilúvatar en los Palacios Intemporales, pero otros descendieron al mundo.Melkor se retiró por el momento, pero cuando los valar tomaron forma corporal también la adoptó y esta vez sí hubo guerra, la primera de ellas sobre Eä.La historia es contada por el elfo Rúmil en esta primera versión del cuento y, si bien el lenguaje que usa difiere bastante del de la versión publicada en El Silmarillion, la trama es muy similar salvo algunas excepciones: se detalla que Ilúvatar crea a los ainur cantando; Melkor se llama aquí Melko y la segunda vez que Ilúvatar se levanta para romper la discondancia que provoca en la música, este llora en vez de estar serio; tras finalizar la música Ilúvatar no muestra a los ainur una visión del mundo, sino a este ya hecho real y en ningún momento se hace referencia a su creación mediante la palabra Eä; al final del cuento hay extractos que describen a los valar y que más tarde serían incorporados a la segunda parte de El Silmarillion, «Valaquenta».No obstante, en 1948 volvió a elaborar una nueva versión, eliminando todo lo relacionado con el Sol y la Luna e introduciendo por primera el pasaje donde Ilúvatar crea el mundo después de que la visión ofrecida a los ainur se apagara.[3] Si bien las críticas se centraron generalmente en la novela completa, los comentarios que recibió «Ainulindalë» fueron positivos.
El escritor británico
Joseph Pearce
elogió «Ainulindalë» diciendo que era el mito «más hermoso de todo el mundo de Tolkien».
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