Denominación y período medio de envejecimiento: De acuerdo con su contenido en azúcares, los vinos pueden denominarse: dulces, semidulces, semisecos y secos.
El primer documento arqueológico del que se tiene conocimiento sobre la elaboración de vino en la provincia, se remonta al Imperio romano y consiste en depósito prismático de fermentación hallado en Cártama.
Su decadencia comenzó en 1878 con la plaga de la filoxera en Málaga, marcando el inicio de la crisis agrícola, económica y después política del principio del siglo XX.
En Málaga capital podemos encontrar numerosas vinotecas o bodegas históricas donde degustar los caldos malagueños, como por ejemplo, El Pimpi o la Antigua Casa de Guardia.
Asimismo se han incorporado nuevos caldos tintos y bodegas, en torno a veinte viñedos, de la comarca de Ronda que se ha ganado en pocos años algunos de los principales premios del sector vinícola español e internacional.
[6] La densidad de plantación está comprendida entre 800 y 5.000 cepas por hectárea.