Lucio Aurunculeyo Cota

La infantería romana montó los terraplenes y despachó un escuadrón de caballería hispana, cayendo sobre el flanco del enemigo y los derrotó de forma aplastante en aquella ocasión.

Los representantes romanos, Quinto Junio, un hispano y Gayo Arpinio, llevaron las noticias al fuerte.

Se formó un consejo de guerra, al que acudieron los oficiales más destacados.

Hablando primero, Cota arguyó que no debían moverse sin una orden de César.

Los romanos pasaron la noche en desorden, reuniendo sus pertenencias y preparándose a salir del fuerte cuando llegase la mañana.

Cuando la mayor parte de la columna había entrado en un barranco, los galos los asaltaron desde ambos lados y buscaron acosar a la retaguardia e impedir a la vanguardia que dejase el barranco.

Durante el enfrentamiento, Cota recibió un golpe en la cara de una piedra lanzada con una honda.

Sólo unos pocos hombres consiguieron escapar para informar a Tito Labieno, un teniente general de una legión próxima, del desastre.

11, durante la campaña belga, César nombró a Cota y Quinto Pedio para comandar la caballería.

32, César al pasar señala que el nombre del fuerte, en el que Cota y Sabino habían acampado durante sus últimos días luchando contra los eburones, era Atuátuca.