Lotte H. Eisner
Murnau, Willy Haas, quien la introduzca en este ámbito creativo, el cine, que comenzaba a dar sus pasos significativos en Alemania.Electricistas, cámaras, actores o directores, todo merece su atención, y, no en último lugar, los decoradores.Murnau, en plena gloria como director, fue reclamado por Hollywood; pero Lotte Eisner se encuentra entre otros con Pabst, Ludwig Berger o Fritz Lang, de quien será siempre amiga.En esta época Henri Langlois será su amigo más fiel y el encargado de ocultarla.Los personajes de Lang serán para Eisner solitarios y románticos héroes nietzscheanos, criaturas trágicas arrastradas por el destino y a menudo incomprendidos por una crítica cinematográfica que ella califica de "burguesa".En 1964 vio la luz su libro sobre Murnau, considerado su segunda obra más importante tras La Pantalla Diabólica.La película El Joven Törless, de Volker Schlöndorff la hará concebir esperanzas, aunque será Werner Herzog su director favorito entre las nuevas generaciones.Eisner se convertirá en el icono de los jóvenes realizadores, Wim Wenders le dedica Paris, Texas (1984) y Werner Herzog Jeder für sich und Gott gegen alle (más conocida por "El enigma de Kaspar Hauser", pero la traducción literal del título es "cada cual para sí y Dios contra todos").Se le ha reprochado omitir los que no encajaban en su estudio e, incluso, ignorar aquellas características que no convenían a su exposición, pero, con todo, su obra es una referencia esencial a partir de la cual se desarrolla todo análisis actual.El interés de la autora por los decorados está presente, junto con otros factores definitorios, en sus análisis.Otros elementos propios del expresionismo cinematográfico son de origen romántico: el misticismo nórdico, lo onírico, irracional y subjetivo, la fascinación por la muerte o la impotencia ante el destino, curiosamente, eso que caracteriza lo germánico, incluso para el nazismo.En estas palabras es especialmente patente: Ya hemos recalcado cómo Lotte Eisner sigue la huella de la influencia del teatro, del claroscuro y de la arquitectura en el cine expresionista alemán, pues el expresionismo llega relativamente tarde al cine.