En ellas, el pueblo reconoce la manera espantosa en que ha pecado y solicita a Dios la liberación de sus sufrimientos.
La Vulgata, desde el siglo IX, la junta con el libro de Baruc y la numera como un capítulo más.
Como se han encontrado fragmentos hebreos en los Rollos del Mar Muerto correspondientes tanto a la LXX como al masorético, se acepta comúnmente que las dos versiones derivan de dos tradiciones hebreas distintas, y que la forma del texto de la Septuaginta es probablemente la más antigua.
En efecto, el libro solo aparece en la versión griega de los LXX y en la Vulgata latina (ésta solo desde el siglo IX).
Atanasio dice "Jeremías con Baruc, Lamentaciones y la epístola"; los otros Padres ofrecen formulaciones similares.