Lenguas indourálicas
Esta hipótesis está basada en similitudes morfológicas y de léxico, aunque la opinión predominante de la comunidad lingüista es que la evidencia disponible es insuficiente para concluir que existe un parentesco seguro entre ambos grupos.Este grupo fue propuesto inicialmente por Vilhelm Thomsen en 1869[1] y fue respaldada por estudiosos como Sweet, Trombetti, Pedersen, Collinder, Cowgill, Schindler, Helimski y Klingenschmitt.Sweet (1900) defendió el origen común de "arios" y "ugrios", aunque había dudas sobre si las similitudes encontradas se debían a préstamos léxicos, difícilmente ciertas correspondencias y terminaciones personales de los verbos suelen prestarse, de acuerdo a la filología comparada.[2] Los argumentos más frecuentes se basan en la similitud morfológica encontrada por ejemplo en las raíces pronominales, marcas de casos, pronombres interrogativos, un orden SOV y otros marcadores menos obvios, así como similitudes en sistemas de conjugación de verbos, los cuales son difícil de transmitir mediante préstamos.También se encuentran semejanzas en el léxico, sin embargo, se toma en cuenta que las lenguas urálicas han estado en contacto con una sucesión de lenguas indoeuropeas durante milenios, por lo que se debe discernir entre préstamos, coincidencias y posibles cognados.