Lamiña es una localidad española perteneciente al municipio de Ruente (Cantabria).
Está situada en un rellano elevado sobre el valle a 360 metros sobre el nivel del mar.
Esta localidad fue quedando con el paso de los tiempos fuera del denominado camino foramontano primitivo.
En cuanto al patrimonio religioso, destaca, en la parte alta del pueblo, la ermita de San Fructuoso (siglo XVIII), que se alza donde había un monasterio en la Alta Edad Media.
De este antiguo monasterio se descubrieron algunos restos tras una excavación, que también puso al descubierto una necrópolis medieval.