Cree haber encontrado la felicidad que hasta ese momento le había sido negada y, ante la satisfacción de su hermano Don Gonzalo, llega incluso a fantasear con la boda.
Numeriano mantiene la ficción por temor a la reacción del sobreprotector Gonzalo.
Para enredar aún más la situación, Tito complica a Picavea, el cual finge también un amor apasionado hacia la señorita de Trevélez.
La farsa llega al límite cuando Numeriano y Picavea planean un duelo por el amor de su dama.
En 1956 Juan Antonio Bardem dirigió el drama cinematográfico Calle Mayor, adaptación muy libre del sainete de Arniches.