La culpa del otro

Fue dirigida por Ignacio F. Iquino y protagonizada, en sus principales papeles, por Luis Prendes, Mercedes Vecino e Isabel de Pomés.

Atraído por los ruidos, el marqués pilla in fraganti a los atracadores, pero muere en el tiroteo resultante.

Pasados unos 20 años, la hija se ha convertido en una cantante profesional (Isabel de Pomés), de la que se enamora el hijo del difunto marqués (Luis Prendes).

Tercera y última de las tres películas estrenadas por Iquino en 1942, este filme mezcla estilos, clases sociales y ritmos narrativos en un batiburrillo que hace difícil su clasificación dentro de un género unívoco: el largometraje se abre con un número musical, la famosa copla Tatuaje, rodado en un magnífico plano secuencia de unos cinco minutos y ambientado en el mundo del hampa portuaria, sorprendente escenario que según algunas fuentes fue censurado en su época.

La película se torna al final en un whodunit, hasta llegar a una escena final digna de Agatha Christie, en la que todos los sospechosos son reunidos hasta desvelar la identidad del culpable.