1948 en Sicilia,[2] Italia), es un músico italiano naturalizado argentino, guitarrista, criado en Rosario, que se hizo famoso como integrante de la legendaria banda de rock Los Gatos (1966-1970), considerada fundadora del «rock nacional» argentino.
En 2012, fue ubicado en la posición n.º 47 entre los 100 mejores guitarristas del rock argentino en la encuesta realizada por la revista Rolling Stone.
Poco después y luego de haber visto una película inglesa en la que aparecía un personaje llamado "Kay", adoptó este seudónimo en su versión definitiva.
En ese momento conoció al baterista Oscar Moro, también de 13 años, con quien luego integraría Los Gatos.
Por entonces conoció a Litto Nebbia y Ciro Fogliatta, también rosarinos, quienes tenían una importante banda de rock llamada The Wild Cats (nombre luego cambiado por su traducción, Los Gatos Salvajes), que ya estaba tocando en Buenos Aires, con un contrato en el difundido programa de televisión Escala Musical.
[5] A comienzos de 1967 Litto Nebbia consiguió que Los Gatos, ahora completados con un bajista proveniente de la zona sur del conurbano bonaerense, Alfredo Toth, fueran contratados como banda permanente de La Cueva, un pequeño y precario club nocturno underground ubicado en Pueyrredón 1723, donde se concentraban los escasos músicos y seguidores del rock local.
[6] Durante esos meses, Kay Galifi, junto a Los Gatos, integró el puñado de jóvenes roqueros que se concentraron en Buenos Aires y dieron origen al "rock nacional argentino".
Ese movimiento tuvo su epicentro original en un triángulo formado por La Cueva, el Instituto Di Tella (Florida 900) y Plaza Francia.
Entre esos bares estaba la pizzería La Perla (del Once), frente a Plaza Miserere, en la esquina de las avenidas Rivadavia y Jujuy.
El tema se convirtió en un éxito masivo e impensado entre la juventud, vendiendo 250.000 placas.
Pocos meses después Los Gatos lanzaban su primer álbum, con todos los temas de rock en español compuestos por Litto Nebbia,[9] encabezado por «La balsa», y que incluía también dos temas que se volvieron éxito: «Ayer nomás» y «El rey lloró».
Galifi participó en los tres primeros álbumes de la banda: Los Gatos (1967), Viento dile a la lluvia (1968) y Seremos amigos (1968), que incluyen otros éxitos masivos y duraderos como "Viento dile a la lluvia", "El rey lloró", "Los payasos no saben reír", "Seremos amigos", "La chica del paraguas", "Mañana" o "Eres un hada al fin", entre otros.
[12] Con sus enseñanzas influyó en toda una generación de roqueros y bluseros brasileños, entre ellos Victor Biglioni, Celso Blues Boy y sobre todo Roberto Frejat, el guitarrista de Barão Vermelho, banda clave del rock brasileño, liderada por Cazuza.
Kay Galifi aceptó y Los Gatos se volvieron a reunir, convocando a dos bateristas históricos, Rodolfo García (ex Almendra) y Daniel Colombres, para ocupar el lugar vacío de Moro.
Ese mismo año Galifi se presentó en Rosario para interpretar en concierto su sinfonía clásica "Amazonas.