Luego del triunfo de Milei en el balotaje, la Coalición Cívica ARI, liderada por Elisa Carrió, decidió abandonar la alianza.Por el lado de Sanz su mejor contienda se dio en Corrientes, donde obtuvo el 29,64 % y la más baja en Tierra del Fuego, donde acaparó al 5,78 %.De esta forma Mauricio Macri y Gabriela Michetti se alzaron como los candidatos oficiales que representarían a la formación política en las elecciones presidenciales.Se ubicó primera en dos distritos: en la Capital Federal con el 49 % y en Mendoza con el 36 %[45] consolidándose así como segunda fuerza nacional, detrás del Frente para la Victoria.Al no haberse superado el 45 % de los votos necesarios para ganar la presidencia, los dos primeros candidatos se enfrentarán en una segunda vuelta.A nivel distrital, se ganaron las gobernaciones de Jujuy con el radical Gerardo Morales a la cabeza quién obtuvo el 58,34 %, y Buenos Aires donde la candidata PRO María Eugenia Vidal se impuso con el 39,42 %, marcando un hecho histórico al ser la primera gobernadora de la provincia más influyente del país y rompiendo con la mayor hegemonía de un partido sobre la misma, la del PJ, que gobernaba desde 1987.Los representantes de ambas posiciones, Horacio Rodríguez Larreta y Martín Lousteau, se midieron en una segunda vuelta, al no haber podido superar ninguno el 50 % requerido.El quinto distrito es Corrientes, donde desde las elecciones de la provincia realizadas en 2013 gobierna una alianza que luego se alinearía con la coalición Cambiemos.[49] Esta posición fue respaldada por la Convención Nacional de la UCR que se reunió en Parque Norte.[50] Unas semanas después Pichetto declaró a la prensa que veía "imposible" integrar una ampliación de la alianza gobernante.[51] Urtubey declaró que funcionarios del gobierno nacional le habían ofrecido la candidatura a vicepresidente.En todas las elecciones provinciales de ese año se observó una intensa competencia interna en Juntos por el Cambio, con listas respaldadas por Horacio Rodríguez Larreta y otras por Patricia Bullrich.[65] Ernesto Sanz, dirigente de la UCR, advertiría que si el PRO apoya a Javier Milei se rompería Juntos por el Cambio, mientras que la excandidata Patricia Bullrich dio su respaldo al dirigente libertario, pero le dejaría libertad de acción a los afiliados del partido.[66][67] Luego del triunfo de Milei en el balotaje, la Coalición Cívica ARI, liderada por Elisa Carrió, decide abandonar la alianza.[76] Como para profundizar esta dualidad, PRO está afiliado a la Unión Internacional Demócrata (de ideología liberal conservadora), pero también tiene vínculos con redes internacionales de think tanks como la socialcristiana Fundación Konrad Adenauer.[84] Un sector que se destaca por no alinearse con las corrientes ideológicas predominantes en la coalición es el representado por Cynthia Hotton.El partido de Hotton ha sido identificado como un bastión del neoconservadurismo[89] y el ultraconservadurismo.