Julia Ruisánchez Nava
Julia Ruisánchez se caracterizó por su labor social hacia los más desprotegidos, de la ciudad, del campo, los migrantes y grupos indígenas; realizó una extensa peregrinación cultural en su misión pedagógica que alcanzó su punto máximo durante las campañas nacionalistas impulsadas por la Secretaría de Educación Pública.Durante esta época se inscribió en la escuela en Feliciano Verdad para estudiar biblioteconomía, titulándose con honores.Al concluir sus estudios, le ofrecieron el puesto de bibliotecaria, el cual rechazó en ese momento.[4] En 1926, fue invitada por Elena Torres a trabajar en las Misiones Culturales Nacionales impulsadas por la Secretaría de Educación Pública, las cuales tenían el propósito de mejorar las condiciones para los maestros que trabajan en las zonas rurales.[5] Estableció el decálogo de la trabajadora social durante las misiones culturales, el cual incluía los siguientes puntos: 1 .Participaba como narradora en las obras de su hijo Miguel Sabido en conferencias ilustradas donde se presentaba un cuadro entre una narración y otra.