Hipólito Yrigoyen

Tras el golpe, fue despojado de sus riquezas como estanciero, y fue confinado a la isla Martín García, en donde compartió presidio con varios presos políticos.[5]​ En su participación en el Club Electoral reclamó un sufragio libre, división de la propiedad rural y reforma del poder judicial, entre otras medidas.[6]​ En 1877 Alem, del Valle e Yrigoyen, en disidencia con el acercamiento de Adolfo Alsina al mitrismo, formaron el Partido Republicano, que propuso como candidato al propio Aristóbulo del Valle y sostuvo una actitud de intransigente oposición a los acuerdos entre dirigentes alsinistas y mitristas.Treinta y cinco personas desarmadas entraron a las 4 de la mañana al cuartel, cuando preguntaron por Martín Yrigoyen fueron detenidos.Aun así la revolución siguió su curso: unos 70 edificios fueron tomados para convertirlos en cantones, algunos resistieron muchos ataques, al punto que, por ejemplo, el de Bolívar y Brasil se rindió únicamente cuando fue amenazada con cañones.[57]​ Yrigoyen se entrevistó entonces con el presidente Figueroa Alcorta en 1907 y 1908 para instarlo a promover comicios limpios, pero con poco éxito.Los partidos provinciales nucleados que controlaban el antiguo régimen fracasaron en su intento de armar una fuerza política conservadora moderna.El historiador Luis Alberto Romero señala que algo había cambiado verdaderamente cuando "unas 100.000 personas acompañaron al nuevo presidente en su trayecto del Congreso a la Casa de Gobierno.[80]​ Concebía al radicalismo como una "religión redentora" para "la liberación argentina", no se veía como un jefe sino como un "apóstol" y pensaba que la Unión Cívica Radical no era un partido más sino "la patria misma":[81]​[80]​ En las elecciones legislativas celebradas en 1918 la UCR obtuvo 367.263 votos, mientras que en las acontecidas en 1920 el total de sufragios fue de 338.723.[88]​ Las naciones en guerra demandaban alimentos baratos, como algunos artículos industriales tales como frazadas y carne enlatada, cuyas exportaciones se triplicaron durante el periodo 1914 a 1920.Se aprobó así la ley n.º 11.728 durante la siguiente administración radical en 1925, pero acabaría vetada por Marcelo T. de Alvear por insistencia del Congreso.Yrigoyen veía con simpatía este movimiento, por lo cual creó nuevas casas de estudio para que las clases medias tuvieran mayor acceso a la universidad.[102]​ Algunas ciudades como Comodoro Rivadavia, en Chubut, Plaza Huincul, en Neuquén, Las Heras, Cañadón Seco y Caleta Olivia, en Santa Cruz se asentaron debido a la proximidad de los yacimientos.[104]​ Pese a su destacable obra petrolera, Yrigoyen no logró nacionalizar los hidrocarburos, pero sentó las bases para evitar convenios que afectaran negativamente la independencia económica local.[106]​ Las organizaciones sindicales, perseguidas durante el régimen anterior, ahora fueron jerarquizadas y colaboraron con las autoridades para solucionar reclamos obreros.En el cementerio se había instalado un pelotón de militares y policías que disparó sobre la multitud, impidiendo la realización del entierro.Pero la oposición estadounidense, sumada al hecho que Brasil ya había roto relaciones con Berlín, hizo fracasar el intento.Pese a que Alvear había tenido actitudes “rebeldes” en el pasado, como el episodio en Ginebra, Yrigoyen siempre mostró aprecio por Alvear; además este había mostrado gran compromiso personal en las revoluciones radicales del pasado, aportando su esfuerzo y fortuna a la causa radical.En algunos casos puntuales tomó medidas contrapuestas a las de su antecesor Hipólito Yrigoyen, y nombró como ministros a varios de los principales líderes antirigoyenistas,[133]​ aunque también mantuvo su autonomía cuando los radicales antipersonalistas le pidieron en reiteradas ocasiones que interviniese Buenos Aires para ganar en 1928, y Alvear rechazó la propuesta.[148]​ Yrigoyen fue elegido presidente nuevamente en 1928, para un período que debió ser 1928-1934, tras derrotar a una coalición de conservadores y radicales antipersonalistas.Yrigoyen tenía varios planes para su segunda presidencia que no fueron tratados en el senado por la férrea oposición de conservadores y radicales antipersonalistas.Carlos Lencinas estaba frontalmente enfrentado con Yrigoyen, quien había intervenido Mendoza, y acababa de ser excluido del Senado por la mayoría yrigoyenista.Al entierro de Lencinas asistió una gran concurrencia, en Buenos Aires se realizó un acto organizado por la Liga Republicana y el Comité Acción.El 2 de marzo se llevaron a cabo las elecciones parlamentarias, en las que la Unión Cívica Radical perdió estrepitosamente en la Ciudad de Buenos Aires: frente a los 100 000 votos obtenidos por el Partido Socialista Independiente, seguidos del Partido Socialista original, con 84 000, los radicales obtuvieron solo 83 000 votos.La fórmula resultó elegida en medio de comicios viciados por la virtual proscripción del radicalismo, y con ello dio comienzo la denominada «década infame», caracterizada por un desenfadado fraude electoral.Tanto en Buenos Aires como en las provincias -todas intervenidas-, el Ejército y la Policía mantenían atenta vigilancia sobre los dirigentes de aquel partido.Del homenaje, participaron los miembros referentes de dicha agrupación Leopoldo Moreau, Gustavo López, Sergio Palazzo y Leandro Santoro.Yrigoyen seguiría tales consignas, además de abogar por la democratización, y por el otro lado adoptando un estilo personal sobrio hasta la severidad.[42]​ Se le criticó no ir al Congreso a leer sus mensajes anuales, siendo ello un signo de “desprecio por la representación pública”.Su hogar no contaba con calefacción ni muebles lujosos, y rechazó inmuebles ofrecidos cuando asumió su primer puesto de legislador.
La estación Plaza Constitución en 1920. En la avenida Brasil, muy cerca de esta estación, vivió Yrigoyen hasta su muerte en 1933. Años después su casa fue demolida para construir la Autopista Frondizi .
Yrigoyen en 1893.
Escrituras del campo Los Médanos perteneciente a Hipólito Yrigoyen.
Placa en el solar en el barrio de Constitución, donde estuvo la casa de Yrigoyen.
Hipólito Yrigoyen, jefe revolucionario en 1893. Dibujo de Demócrito de Eduardo Sojo, publicado en la revista Don Quijote .
Miembros de la Revolución del Parque (izquierda a derecha): Marcelo T. de Alvear , José Crotto , Enrique Pérez, Luis Basaíl, Tomás Valleé y Mariano de la Riestra. Las revoluciones radicales produjeron profundos cambios políticos para finales de siglo.
Leandro N. Alem era el tío de Yrigoyen, y fue el modelo que siguió. En 1896, tras el suicidio de su tío, comenzaría a adoptar su característica personalidad reservada.
Una de las primeras fotografías tomadas a Yrigoyen en público. Saliendo de una Convención de la UCR en el Salón Príncipe Jorge de la ciudad de Buenos Aires, en 1909.
El presidente Hipólito Yrigoyen en coche presidencial, recorre la avenida de Mayo durante su asunción.
Primera urna electoral empleada en las elecciones de 1916, expuesta en el Museo del Bicentenario .
Yrigoyen en la ventanilla del ferrocarril (viaje a Santa Fe durante la campaña electoral de 1926).
Estudiantes universitarios trasladados por la policía, Córdoba, 1918.
El general Enrique Mosconi fue nombrado por el siguiente gobierno radical, Marcelo T. de Alvear .
Cañones en la esquina del Congreso, durante la semana trágica, 1919.
Escena de la semana trágica.
Obreros en huelga durante la Patagonia rebelde.
Yrigoyen frente a la Catedral Metropolitana de Buenos Aires recibe el homenaje de un representante del Reino de Italia , 1920.
Yrigoyen y Alvear conversando.
Yrigoyen al asumir en 1928.
La policía custodia la puerta de la casa de Yrigoyen, en la calle Brasil 1039, luego de haber sido saqueada.
Yrigoyen regresa a Buenos Aires tras el presidio en la isla Martín García .
En febrero de 1932, Yrigoyen regresaba de su encarcelamiento en la Isla Martín García.
Una multitud de personas llevaron el féretro hasta el cementerio.
Yrigoyen haciendo su característico saludo a la gente.
Poncho , bastón y bombín de Yrigoyen en el Museo del Bicentenario .
Carruaje faetón de Yrigoyen en el Museo del Bicentenario