Juan Bernardino

Toda esa noche y el día siguiente Juan Diego estuvo cuidando a su tío.Al anochecer, parecía evidente que Juan Bernardino iba a morir.Ella le dijo que se le había aparecido a Juan Diego en el cerro del tepeyac y le había enviado a que se encontrara con el obispo (el primer obispo de México, Juan de Zumárraga) con su sagrada imagen grabada en su tilmatli.En esta aparición la mujer se identificó como La Siempre Virgen Santa María de Guadalupe.[1]​ Aunque este argumento viene desde 1675, año en el que Luis Becerra Tanco lo menciona por primera vez (nombre nahuatl de Guadalupe), no existe ningún escrito en nahuatl que lo confirme, todos los documentos antiguos que mencionan el nombre de Guadalupe está escrito tal cual "Guadalupe".
Juan Bernardino
Santa María de Guadalupe se le aparece a Juan Bernardino