Posteriormente trabajó en el taller de Pere Carbonell.
En 1912 ganó la tercera medalla en la Exposición Nacional de Escultura.
[2] Vivió toda su vida en el barrio de Gracia, donde estuvo vinculado a asociaciones culturales como el Centre Moral i Instructiu de Gràcia y Lluïsos de Gràcia, entidad esta última que presidió entre 1903-1905 y 1907-1909, hasta que se casó.
Una de sus obras más importantes es el monumento dedicado en 1950 al cardenal Vives i Tutó en San Andrés de Llavaneras.
En el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia, obra de Antoni Gaudí, realizó las imágenes de la Inmaculada Concepción, San José y el Sagrado Corazón para la cripta del templo.