José de Marcoleta

El Director Supremo del Estado, Manuel Pérez, nombró para ese fin al licenciado Francisco Castellón Sanabria, como ministro Plenipotenciario de Nicaragua ante Francia e Inglaterra, y al doctor Máximo Jerez Tellería como Secretario.

Se considera que esta fue la primera delegación diplomática nicaragüense enviada a Europa.

Marcoleta, por su amistad personal con Napoleón III, logra gran apoyo para Nicaragua.

De este modo se hacen más evidentes los intereses y la presencia norteamericana en Nicaragua.

El 30 de abril de 1852, se firma en Washington entre los Estados Unidos y Gran Bretaña, las proposiciones Webster-Crampton, en las cuales, sin haber intervenido el representante de Nicaragua, se le despojaba de la Costa Atlántica y se estipulaba que la línea divisoria entre Nicaragua y Costa Rica sería a lo largo de todo el río San Juan, prolongándose sobre el borde costero del Gran Lago, perdiendo Nicaragua la costa sur del Gran Lago.

La denuncia desata un escándalo político que provoca la caída del Secretario de Estado Daniel Webster, quien murió poco después.

A causa de la trascendencia política que tuvieron las denuncias en la prensa norteamericana, el nuevo Secretario de Estado Edward Evertt declaró non-grato a Marcoleta, al comunicarle que ninguna comunicación suya, como enviado de Nicaragua, sería recibida en el futuro.

El Encargado de Negocios de los Estados Unidos en Nicaragua, John Bozman Kerr solicita al gobierno que retire a José de Marcoleta y rehusaba ceder a la petición de Nicaragua para que se le informase sobre los cargos que les habían llevado a tomar tal medida e insiste sobre su pronta remoción.

Aunque evaden la justicia mediante una fianza; se logra impedir la salida de los vapores que conducían a los aventureros.

José de Marcoleta trabajaba afanosamente por impedir esas expediciones, desplegando su habilidad diplomática ante el Gobierno, protestando enérgicamente contra la violación del derecho internacional, trabajando en los altos círculos en pro de la causa de Nicaragua y denunciando en la prensa el crimen que se estaba cometiendo “contra un pueblo débil e indefenso”.

Napoleón III.
Daniel Webster.