José María Villanueva

Tuvo la particularidad de haber sido ejecutado, salvando su vida gracias a su obesidad.

Ingresó como oficial en el Regimiento de Granaderos a Caballo en 1816, y pasó a Chile al año siguiente, combatiendo en la Batalla de Chacabuco, en la que fue gravemente herido.

En 1821 participó en la Batalla de Punta del Médano contra el caudillo chileno José Miguel Carrera.

Al finalizar la batalla, Aldao se enteró de que su hermano había sido muerto mientras negociaba la paz en el campamento enemigo; de modo que vengó su muerte realizando una matanza entre los oficiales prisioneros, entre ellos Villanueva, que fue degollado en el patio del cuartel de la maestranza, donde su cuerpo quedó abandonado.

Reapareció en público seis meses más tarde, tras la invasión a Mendoza del coronel unitario José Videla Castillo, que asumió el gobierno provincial.