[1] Su padre (millonario, pornógrafo, escritor) arrojó ácido en el rostro de su madre, de la que se estaba divorciando tras un matrimonio mal avenido y tormentoso, y tras ello se suicidó.
Su madre, hija del gobernador de Córdoba Amadeo Sabattini, tras penosos intentos por reconstruir su cara con decenas de operaciones en América y Europa, se quitaría la vida años después (1978), y luego sus dos hijos, también afectados psíquicamente por estas traumáticas experiencias, primero María Cristina en 1988 y el último Jorge.
Colaboró desde 1968 en distintos medios editoriales argentinos como corrector, redactor, editor, traductor y negro literario (Editorial Kapelusz, Arte al Día, Clarín y Radar, suplemento cultural del diario Página/12), trabajó en diversos periódicos y ejerció la crítica de arte en La Voz del Interior.
Asmático, alcohólico secreto, sin relaciones sentimentales fijas y aquejado por una profunda depresión, se suicidó el 9 de septiembre de 2001.
Póstuma apareció una recopilación de su labor periodística, Por dentro todo está permitido (2010).