[2] Quero siguió juicio de residencia, por instrucciones del rey, a los dos gobernadores que lo habían precedido en el cargo: Fernando Centeno Maldonado y Juan de Vargas Machuca.
[1] Durante su breve mandato se le reconoció su dedicación a la administración de la región, su seriedad en el manejo de los asuntos públicos y su benevolencia hacia los indígenas mayas.
Exigió, en este sentido, que se pagase justamente el trabajo de los naturales, no se tuviera hacia ellos una actitud expoliadora e incluso que se incrementara significativamente el monto de la paga por ciertas tareas que eran realizadas por ellos.
[1] Ante la noticia de su muerte, Fernando Centeno Maldonado, quien se encontraba en el puerto de Campeche, solicitó de inmediato al virrey que le fuese concedido regresar interinamente a la gubernatura de Yucatán mientras el rey hacia el nombramiento definitivo del sucesor.
El virrey, Rodrigo Pacheco y Osorio, marqués de Cerralbo, otorgó nuevamente el mandato a Centeno Maldonado, a pesar de su no muy buena fama pública.