Jacinto de Salas y Quiroga

En mayo de 1830 emigró a América, estableciéndose en Lima, donde publica sus primeros poemas.

Yo quisiera que el poeta, menos sujeto a reglas y más observador de la naturaleza, no caminase siempre por el sendero que han trazado sus mayores.

(...) Byron hizo bien, y no hizo como manda Boileau; Víctor Hugo tiene rasgos sublimes en sus obras, y no conoce más ley ni más barrera que su imaginación.

Terribles son a veces estas, lo confieso; pero no por eso dejan de ser bellezas.

(...) Jóvenes españoles, unámonos todos; cantemos acompañados de la misma lira; pidamos fuego, no al mentido dios de los paganos, sí al ángel tutelar de la patria...En 1839 pasó cinco meses en Puerto Rico, recorriendo las Antillas en una comisión oficial.