Jacint Salvadó

Jacint Salvadó i Aragonés Mont-roig del camp 1892 es un pintor, grabador y ceramista español.Contrajo el paludismo en su infancia, lo que le lleva a pasar muchas horas dedicado al dibujo, despertándose así una vocación que lo llevará trasladarse a Barcelona donde en 1907 inicia su formación pictórica en La llotja.[1]​ Entre 1907 y 1913, viajará a París, Madrid, Marsella pero no será hasta 1919 cuando se instalará en la capital francesa, donde ingresará en la Escuela de Bellas Artes, conocerá a artistas como Ossip Zadkine o Lipchitz y entrará en contacto con las Vanguardias.Ya integrado en la vida parisina, regresa a Barcelona en 1921 para presentar su primera exposición en las célebres Galeries Dalmau de Josep Dalmau, las mismas en las que expusieron Picasso, Miró, Dalí o Torres-García entre muchos otros.Esta relación se romperá cuando Picasso le pida que pose para él y Salvadó quedaré inmortalizado en los célebres retratos de arlequín.La llegada de la República le lleva a pasar temporadas en Cataluña pero en 1935 se exilia definitivamente instalándose en Le Castellet, donde residirá hasta que su interés por la abstracción y el estallido de la Segunda Guerra Mundial le llevan a trasladarse a Suiza donde contacta con el grupo de la Bauhaus y se relaciona con Jean Arp o Auguste Herbin.Cuando en 1946 Herbin inaugura el Salon des Rrealites nouvelles, Salvadó se incorporará en las ediciones de 1948 a 1956.Fallece su mujer Anita y decide trasladarse a París donde expondrá en la galería Simone Héller.Comisariada por Maria Lluïssa Borràs, la muestra presenta desde sus inicios marcados por el expresionismo hasta la etapa geométrica final incluyendo sus años informalistas.