Tradicionalmente la ganadería y la agricultura han sido las principales fuentes de riqueza del municipio.
Un vistazo a las estadísticas muestra como se ha producido un paulatino abandono de las actividades agrarias antes predominantes en Izalzu.
Desaparecieron por completo las tierras labradas y ya quedan únicamente pastos para el ganado.
Destacan 2 familias dedicadas a la ganadería ovina y que contaban con 1333 cabezas de ganado.
Los últimos datos de población activa parece que indican un pequeño repunte de la población dedicada al sector primario y ligado a las pocas explotaciones que han sobrevivido.
La gente que trabaja en los sectores secundario y terciario realiza su trabajo en buena medida fuera del municipio.
En los últimos años el turismo rural está cogiendo un importante peso en la economía local.
En Izalzu se conserva la leyenda de Gartxot, un bardo navarro medieval que fue emparedado en vida por haber cometido un crimen horrendo.
Apoyándose en esta leyenda, el escritor Arturo Campión escribió uno de sus relatos más célebres: El bardo de Itzaltzu, una encendida defensa del euskera y la cultura popular vasca frente a los avances de la latinización impulsada por la iglesia y el Estado navarro, ambientada entre los siglos XI y XII.
Esta obra sería fruto posteriormente de adaptaciones teatrales, musicales y cinematográfica.