[2] Su nombre procede de la primera planta en que se aisló en 1804, el helenio (Inula helenium).[cita requerida] Se considera que la dieta occidental aporta 1−10 gramos diarios de inulina.Una vez ingerida, la inulina libera fructosa durante la digestión, aunque en pequeña proporción, puesto que el organismo humano carece de enzimas específicas para hidrolizarla.Además, la inulina es una sustancia útil para evaluar la función del glomérulo renal, puesto que se excreta sin ser reabsorbida a nivel tubular.La inulina estimula el crecimiento de la microbiota intestinal (microorganismos pobladores del intestino) benéfica.[8],[9] y por promover el crecimiento de microorganismos beneficiosos para la salud se considera que tiene actividad prebiótica.[14] Se ha estimado que la dieta occidental aporta 1−10 gramos diarios de inulina o fructooligosacáridos.Aunque en algunas circunstancias no resulta apropiada,[21] la inulina se ha utilizado en la práctica clínica para medir el índice de filtración glomerular (IFG)[22] En esta técnica se basa en una de las muchas propiedades de la inulina, puesto que al ser un compuesto inocuo, no degradable por las enzimas del organismo humano, que filtra casi completamente a nivel del glomérulo renal, y lo hace sin ser reabsorbido ni excretado a nivel tubular.Este análisis, si bien es largo y caro, brinda información esencial acerca del volumen sanguíneo que filtra el riñón por unidad de tiempo.