El instrumento aparece fundamentalmente en las primeras obras y se puede escuchar muy claramente en la Presentación, del disco Sonamos, pese a todo.
De todas formas, en las últimas obras, se ha sustituido el arco por sus propios dedos, tocándolo en pizzicato.
La rueda trasera lleva 6 plectros que al girar tañen las cuerdas de la mandolina logrando un sonido «tremolando».
Su único ejecutante es Carlos Núñez Cortés y se estrenó en 1985, en el show Humor dulce hogar.
El instrumento, así construido suena casi como una guitarra real y posee todas las características de esta.
Este instrumento fue construido por Carlos Iraldi y parodia a un contrabajo, sólo que su caja de resonancia es un barril.
Para ejecutar este instrumento el músico debe introducirse dentro del barril sacando los brazos por la parte superior.
Posee además 5 ruedas en la parte inferior que permiten al ejecutante ir caminando mientras toca el instrumento.
Es ejecutado por Jorge Maronna en San Ictícola de los Peces Se estrenó en 1994, en el show Unen canto con humor.
Además en este se le ha añadido una placa conmemorativa a Carlos Iraldi, el maravilloso Luthier de Les Luthiers.
La construcción del narguilófono obedeció a la necesidad de formar una orquesta tipo árabe para la obra Serenata medio oriental.
El aire es proporcionado por dos fuelles, sujetos bajo los zapatos del intérprete, y enviado mediante tubos anillados a un tercer fuelle-reservorio, instalado en la parte inferior de la mochila.
La manguera ha sido seccionada por su parte media y se le agregaron pistones de trompeta.
Las obras grabadas en las que se usó fueron: Miss Lilly Higgins Sings Shimmy in Mississippi's Spring, 1977, El Asesino Misterioso, 1979, Cartas de Color, 1980, Marcha de la Conquista, 1981, Vea esta Noche, 1986, y Truthful Lulu Pulls thru Zulús, 1986.
Un día se probó acoplando una bocina de gramófono al kazoo y así nació la bocineta.
Se podría decir que es un kazoo informal, si bien el principio de funcionamiento es ligeramente distinto.
El efecto visual de este instrumento es muy notable, al igual que su potencia sonora.
Cada «banquito» emite una sola nota, o sea que se necesitan varios ejecutantes para tocar una simple melodía.
Poseen, además, un dispositivo que bloquea el sonido cuando no se necesita en un momento dado.
Este instrumento es una melódica a la que se le han conectado dos grandes globos de cotillón.
Años más tarde, Hugo Domínguez perfeccionó el instrumento empleando la tubería de un trombón a pistones.
Su versión más reciente fue estrenada en 1999, en el show Todo por que rías y su intérprete era Daniel Rabinovich.
Nota: Según la Real Academia Española, un calefón es un "aparato a través de cuyo serpentín circula el agua que se calienta para uso generalmente doméstico".
El instrumento porta también una pequeña bocina, que ha sido afinada en tres notas distintas (una para cada tabla).
La cabeza tenía boca, mejillas, ojos y cejas con los que podía expresar alegría, enfado o tristeza.
Todas estas funciones eran gobernadas desde bambalinas, y por control remoto, por tres personas a la vez.
En aquella ocasión, durante el transcurso de la obra, Antenor explotó en mitad el escenario ante la mirada de todos los que allí se encontraban, y no pudo interpretar los últimos compases con los que la obra debía terminar.
El mismo puede verse y ejecuta una rutina programada en la sala Cronopios del Centro Cultural Recoleta.
Los ejecutantes se colocan detrás del instrumento que, al ser luminoso, no deja ver a los músicos.
Cuando comienza la obra, los ejecutantes sacan las manos -enfundadas en guantes blancos- entre los tubos y los "tañen" como si fueran las cuerdas de un arpa.