A los 18 años Ferdinando tomó las riendas del negocio y en poco tiempo lo expandió.
Este negocio estaba dedicado a la venta de tubos sin soldadura producidos por Dalmine.
Fue entonces cuando en 1932 Innocenti decidió trasladarse a Milán donde la recesión no se sentía tanto como en el resto de Italia.
Ya en Milán "Fratelli Innocenti" pasó de una veintena en 1929 a un centenar en 1933.
Entre 1961 y 1976 Innocenti fabricó bajo licencia de BMC (más tarde British Leyland Motor Corporation, o BLMC) el modelo Mini, con motores de 998 cc y 1.275 cc. A este le seguirían otros modelos, como el Regent, con motor de 1.485 cc. Debido a esto la compañía era generalmente llamada Leyland Innocenti.
[1] La compañía británica tenía grandes expectativas para su flamante subsidiaria, ya que en ese momento Innocenti estaba segundo en ventas en el mercado italiano, siendo solo superado por la Fiat, y se posicionaba adelante de Volkswagen y Renault.
Tres años más tarde BLMC entraría en quiebra y sería nacionalizada por el gobierno de británico.
Las exportaciones, que se habían llevado a cabo principalmente por los concesionarios BMC, comenzaron a caer en los años ochenta, ya que esta no quería tener competencia interna con sus propios productos.
Casi al mismo tiempo, el acuerdo con BMC terminó, y pronto la producción cayó por debajo de las veinte mil unidades.
A partir de 1990, cuando Fiat se hizo cargo de Innocenti, se comenzó a vender el Yugo Koral y versiones-brasileñas del Fiat Uno (la familiar Elba y Uno Mille) en el mercado italiano.
Sus nuevos propietarios Industrie Riunite SpA, Euro Mobile International BV, Finambiente Group SpA y la familia Perrotta todavía no han anunciado su plan de negocios, como así tampoco cuando se materializará el retorno de la marca con un nuevo modelo.
Sin embargo aseguran que su propósito es continuar con la fabricación de automóviles tras la interrupción ocurrida en el año 1997.