La Inmigración española en Puerto Rico surge desde la época colonial en la isla, descubierta por Cristóbal Colón en 1493 al servicio de España y colonizada después cuando los conquistadores españoles junto a Juan Ponce de León y Figueroa se instalaron.
Actualmente, los blancos del país también tienen rasgos de mestizaje, es decir que también que bajo pruebas genéticas llevarían varios porcentajes de sangre taína, y guanche (aborigen canario), así también del África subsahariana.
[5] Al año siguiente, el asentamiento se abandonó a favor de un islote cercano en la costa, llamado Boriquén por los taínos debido a los cangrejos o cangrejales existentes, que tenía un puerto adecuado.
No se conoce el número de canarios que emigraron a Puerto Rico en los primeros tres siglos del gobierno ibérico.
[10] Los isleños aumentaron su tráfico comercial e inmigración a las dos provincias españolas restantes en América, Puerto Rico y Cuba.