Industrias Eduardo Sal-Lari

La fabricante francesa de automóviles Citroën decide hacia 1980 retirarse del mercado argentino y vende el paquete accionario de su filial local (Citroën Argentina S.A.) al ingeniero Eduardo Sal Lari.[1]​ Sal Lari tenía importantes vínculos comerciales con Citroën Argentina ya que era propietario de la firma Daher Boge que fabricaba y proveía amortiguadores para automóviles a la firma francesa.Durante un tiempo, la firma (aún llamada Citroën Argentina), continuó produciendo automóviles marca Citroën con el lote de autopartes que había recibido Sal Lari al comprar el paquete accionario.También durante este período se compraron unidades francesas para comercializarlas en Argentina.El interior del habitáculo tuvo cambios: volante, instrumental, tablero completamente distinto a los ya acostumbrados del anterior 3cv, palanca de cambios en el piso, y además de la llave de arranque, había que colocar una tarjeta electrónica, para que el motor se encendiera.