La imagen real es aquella que se forma cuando, tras pasar por el sistema óptico, los rayos de luz son convergentes.
Esta imagen la podemos percibir directamente con nuestro sentido de la vista colocando el ojo tal que los rayos que le llegan ya hayan pasado por el punto de convergencia (punto imagen).
La imagen virtual es aquella que se forma cuando, tras pasa por el sistema óptico, los rayos divergen.
Para nuestro sentido de la vista los rayos parecen venir desde un punto por el que no han pasado realmente.
La imagen se percibe en el lugar donde convergen las prolongaciones de esos rayos divergentes.