En el primer semestre del año 1977 en el sector de la Quebrada Chiqueiza, las incursiones militares ecuatorianas destruyeron un hito fronterizo.
El 1 de diciembre, una patrulla del ejército ecuatoriano compuesta por 60 hombres fueron sorprendidos y capturados por el ejército peruano en inmediaciones del puesto de vigilancia «Llave», zona declarada de Perú.
Las tropas ecuatorianas luego de haberse retirado de su campamento construido volvió a contraatacar días después suscitándose otro enfrentamiento armado esta vez apoyadas con un helicóptero de la FAE, las tropas peruanas resistieron y repelieron el ataque.
[4] Al mando de las tropas peruanas estaban los tenientes de Infantería Carlos Vassallo Doig y Luis Alarcón Llerena.
Ante la gravedad que podría alcanzar este incidente los gobiernos de Perú y Ecuador convinieron en llegar a un acuerdo.