Durante su niñez comenzó a tener la curiosidad e inquietud por modificar y mejorar la ciudad de Guadalajara.
Retoma los elementos de la arquitectura vernácula de occidente como: los patios, jardines y fuentes, buscando crear espacios en el que el hombre pueda encontrase a sí mismo.
Su teoría de la arquitectura era buscar la esencia y el quehacer arquitectónico, pensamiento que se vio reflejado durante toda su carrera en cada una de sus obras y fue fomentada en sus estudiantes.
[4] Su lema era “Concebir primero la cosa poética y alrededor de ella levantar los muros”.
[9] También se invitó a un escultor mexicano de origen alemán; Mathias Goeritz.
Fue amigo de Luis Barragán Morfín,[12] José Amezcua Rivas y Rafael Urzúa.
[13] Definió la Arquitectura como la obra de arte que consiste en el espacio expresivo delimitado por elementos constructivos para compeler al acto humano perfecto.
Guadalajara, México, Margarita González Luna de Díaz-Morales, 1997. artístico.