Durante la época merovingia aún se conservaba la tradición romana de los ritos funerarios extra muros por razones sanitarias.
A la muerte y posterior enterramiento de Santa Radegunda, la iglesia cambia su nombre.
El ábside con su cripta y su deambulatorio, así como el piso inferior de la torre, parecen pertenecer a esta época.
El exterior se caracteriza por una elegante cabecera que traduce perfectamente el plano de la iglesia: una cripta iluminada por la luz del día, tres absidiolos, un ábside y una aguja en el muro oriental.
Es una cabecera angulosa que anuncia el arte gótico, aunque se suaviza por las arcadas situadas en la base.
En el ángulo nordeste se sitúa una escalera de linterna que permite acceder al segundo piso, también cuadrado.
La nave fue reconstruida por completo en el siglo XIII en estilo gótico angevino siguiendo el modelo de la catedral vecina.
La construcción de la nave se realizó en dos momentos diferentes, tal y como lo demuestran los vanos.
En el muro norte del segundo piso se puede admirar una magnífica vidriera que data de 1270, aunque fue retocada posteriormente.
Está consagrada a la Pasión de Cristo y al Juicidio final.
Esta sala, llamada capilla de María Magdalena, era utilizada por los canónigos como oratorio.
El ábside heptagonal está rodeado por un deambulatorio, donde se encuentran capillas semicirculares, siendo las últimas de estilo románico.
La capilla axial data del siglo XI y está dedicada a la Virgen.
Hivonnait, en lugar de respetar y conservar las pinturas del siglo XIII, las repintó en un estilo neogótico.
Aunque las pinturas originales desaparecieron, la coherencia del mensaje iconográfico se mantiene hoy en día.
La parte superior de los muros constituye un ciclo hagiográfico dedicado a Santa Radegunda.
Tras la estatua de la santa, en la parte alta y a la izquierda, encontramos un ex-voto donde se lee "Gracias por el bien obtenido, os pedimos pronta curación" (original francés: "Merci pour le mieux obtenu, demandons entière guérison").
Este órgano causó muchos problemas desde el primer momento, como el riesgo de caída, por lo que el instrumento se desmontó progresivamente durante las dos guerras mundiales.
Se llevaron a cabo restauraciones; una de ellas, en 1991, causó un gran problema que inutilizó el instrumento dejándolo sin sonido.
Vi la tumba: está hecha e un bonito estilo gótico del siglo XII, clavada en la tierra...