La iglesia, de amplias dimensiones, tiene una sola nave acabada en ábside semicircular, y transepto.
En el crucero se levanta un cimborrio octogonal con lunetos y pechinas decoradas con relieves de yeso, elementos que muestran la reconstrucción del siglo XVIII.
El tímpano es liso, pero el dintel aparece esculpido con relieves que representan la Virgen, el Niño entre dos ángeles, la Epifanía y la Anunciación.
[2] En el siglo XVIII se inicia el derribo para aprovechar los materiales para la construcción de la nueva iglesia parroquial.
Afortunadamente, a finales del mismo siglo (1772) se repararon las partes dañadas, con la construcción del nuevo cimborrio, reconstrucción que le dio la configuración actual.