Sin que esté desacralizada, no se celebra culto regularmente, dada la escasa cantidad de habitantes del lugar.
La pavordía tuvo abad propio, y el cargo de pavorde pasó al rector de la parroquia al extinguirse el monasterio.
Es un edificio románico muy modificado, con la nave y el ábside sobre alzados posteriormente.
Esta bóveda de ladrillo pertenece a la época barroca, y debió sustituir la primitiva románica al rehacerse la iglesia.
El ábside semicircular se abre a levante mediante un arco presbiteral estrecho.