Fue la primera dinastía islámica en establecerse en el Magreb occidental, a finales del siglo VIII.
[1] Su hijo Idrís II (791-828) fundó Fez como residencia real y capital del emirato.
[2] Pese a ello, los hijos de Muhammad, Alí y Yahya I lograron reinar con bastante tranquilidad.
[3][5] Inicialmente, se mostraron partidarios de estos, pero apoyaron a los omeyas más tarde.
[7] Musa ibn Abi l-Afiya, al servicio fatimí, los persiguió y no los exterminó debido a la intercesión en su favor de las tribus bereberes.
[9] La gran campaña fatimí del 958-959 en el Magreb occidental volvió a someterlos al control de aquellos.