Un relato sostiene que tras el diluvio universal los descendientes de Noé se desperdigaron por el mundo.
Uno de sus nietos, Tubal, llegaría a Asturias y allí reinaría.
Esta tesis se apoya en los topónimos hebreos de varios lugares asturianos.
La Edad del Hierro, aparece marcada por la cultura de los castros.
[3] Como sucede prácticamente en toda España, tras la guerra civil comienza también en Ibias un éxodo del campo a las ciudades.
Su red hidrográfica está marcada por el río Ibias que atraviesa el concejo de este a oeste y recibe sus aguas de numerosos afluentes como son: el Forma, el Cervos, el Piliceiro, etc.
Cuenta, por ejemplo, con urogallos, zorros, lobos, martas, jinetas, gatos montés, liebres, tejones, corzos, jabalís, rebecos u osos pardo.
La densidad de población no llega a 10 habitantes por kilómetro cuadrado.
De la Red Comarcal: Tradicionalmente la economía se ha basado en el sector primario.
El centeno ha sido desde siempre uno de los sembrados clave y abundante.
Se mantiene la vieja tradición de cultivo del viñedo, existiendo importantes bodegas por ejemplo en Cecos.
[7] El sector terciario se concentra en San Antolín, la capital del municipio, y en Luiña.
Hay además diferentes establecimientos hoteleros en otras zonas del concejo.
Este concejo carece de grandes monumentos pero tiene unos bonitos ejemplos románicos y una construcción popular muy interesante.
En Ibias, Degaña y Cangas de Nancea el teitado se hace con la técnica a beu.[n.
El interior comparte vivienda con establo de animales; son las casas-establo que en los Ancares se conocen como pallozas.
Los artesanos pasaban largas temporadas en sus pueblos elaborando todo tipo de utensilios para luego venderlos en mercados y ferias.
[14] En el concejo de Ibias, desde 1979, el partido que más tiempo han gobernado ha sido el PSOE.