El INTI nació como respuesta al interés en la Argentina de disponer de un instituto de investigaciones aplicadas a la industria que cumpliera funciones similares a las que habían comenzado a desarrollar, hacia fines del siglo XIX, otras instituciones en Estados Unidos, y años más tarde en Europa y América Latina.
Su primer presidente fue el ingeniero Salvador María del Carril, quien desempeñó ese cargo hasta 1973.
Esa expansión le ha permitido al instituto cubrir una amplia gama de especialidades industriales, en articulación con universidades, laboratorios estatales, empresas públicas, cámaras empresarias y otras organizaciones −del país y del exterior− vinculadas con la actividad tecnológica.
En 1976 sucede un golpe militar en el país y un gobierno de facto toma el poder hasta 1983.
La dirección del INTI quedó en manos de la Armada, que nombró como presidente al capitán José A.
[5] Sin embargo, se produjo un progresivo vaciamiento del instituto que pasó de tener 2000 trabajadores en 1986 a 940 en 1994.
Durante su gestión el Instituto profundizó su rol social en forma paralela a su tarea con las pymes y grandes empresas.
[9] En diciembre de 2015 vía decreto de necesidad y urgencia el presidente Mauricio Macri designó al frente del INTI a Javier Ibáñez (Ingeniero Industrial), quien ante se había desempeñado en la comisión directiva del club Atlanta.
[15][16] En la actualidad el INTI posee seis áreas temáticas en su sede central en Buenos Aires, cada una con dos o más Centros INTI y cada uno de ellos con uno o más campos de acción y servicios.
Ahora, este proceso, llamado afieltrado, puede quedar en manos de una máquina diseñada por el INTI.