La mayoría de ellos se asentó en un principio en la Colonia del Cabo, pero luego fueron absorbidos por la población afrikáner y afrikáans, debido a que tenían similitudes religiosas con los colonos neerlandeses.
Debido a la política instituida en 1701 por la Compañía Neerlandesa de las Indias Orientales que obligaron a que las escuelas enseñen exclusivamente en neerlandés, que toda la correspondencia oficial se realizada en neerlandés, y estrictas leyes de asamblea, los hugonotes dejaron de tener una identidad cultural distinta para mediados del siglo XVIII, y el conociento del francés se disminuyó y eventualmente desapareció como un idioma hablado en los hogares.
El área poco después fue renombrada como le Coin Français ("la esquina francesa"), y más adelante Franschhoek.
Un museo dedicado a la historia hugonote en Sudáfrica está ubicado al lado del monumento.
Varios nombres franceses también se volvieron populares entre afrikáneres, entre ellos Francois (François), Jacques y Eugene.
Muchas de las granjas en la Provincia Occidental del Cabo aún llevan nombres franceses, tales como Cabrière, La Bourgogne, La Bri, La Chataigne y La Roche.