[2][3] Huésped deriva del término latino hospes,[1] el cual es un compuesto antiguo de dos nociones distintas: *hostis-pet-s.
Esta palabra, que evidencia la institución de la hospitalidad, es muy antigua, ya que en otras lenguas indoeuropeas hay equivalentes con el mismo origen y uso como en el gótico gasts y el eslavo antiguo gosti.
Así, la palabra hostis asumió una acepción de «hostil» y ya no se aplicaría más que al enemigo.
Del mismo modo, xenos, tan bien caracterizado como «huésped» por Homero, se convirtió más tarde simplemente «el extranjero», «el no nacional».
[3] Aunque hace esto con una excepción para la cual no se atreve a imponer su recomendación y es que en el ámbito científico es de uso frecuente la palabra huésped con el significado del «organismo que aloja» un parásito o un simbionte.
Sin embargo, en el ámbito científico hispano con la misma o más frecuencia es rechazado debido a su uso contrario al significado común y es sustituido por (o se prefieren) los términos hospedador,[5] hospedero,[6] anfitrión u hospedante.