En otras se usa pan con levadura al igual que lo hace la iglesia ortodoxa.
[5][6] Esta enfermedad ha sido considerada tradicionalmente como un trastorno únicamente digestivo, pero actualmente se sabe que se trata realmente de una enfermedad crónica, multiorgánica autoinmune, que afecta al intestino[7][8] y puede dañar prácticamente cualquier órgano o tejido.
[11][12][13][14] [15] [16][17] Estudios actuales demuestran que aproximadamente el 80% de los celíacos continúa teniendo lesión intestinal, a pesar del tratamiento mantenido con la dieta sin gluten.
[20][21] En un documento dado a conocer en julio de 2017, elaborado por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos por encargo del papa Francisco, se recuerda que las hostias no pueden ser sin gluten, si bien se permite que el pan y el vino de la Eucaristía se preparen con "organismos genéticamente modificados".
[22] En el comunicado se señala que "'Las hostias sin nada de gluten son materia inválida para la Eucaristía' (…) en relación a las normas respecto a las personas que, por diversos y graves motivos, no pueden tomar pan preparado normalmente".