[1] En junio de 1976, la dictadura militar dirigida por Augusto Pinochet acusó a la revista Ercilla de «propaganda antipatriótica» e intentó convencer a su dueño, Sergio Mujica, de cambiar la línea editorial y a su director Emilio Filippi Muratto; finalmente la revista fue vendida al grupo económico simpatizante del oficialismo Cruzat-Larraín, renunciando su director y equipo.
Frente a lo acontecido con Ercilla, se decidió crear una sociedad de periodistas que serían los dueños de la nueva publicación.
[1] Sus creadores estaban políticamente ligados al Partido Demócrata Cristiano (PDC), colectividad que para el año 1977 entraba con fuerza a formar parte de la coalición opositora al régimen, y algunos medios ligados a esta corriente fueron clausurados, como la Radio Balmaceda y la revista Política y Espíritu.
El humor político estuvo a cargo de Hernán Vidal Martínez ("Hervi"), Alejandro Montenegro ("Rufino") y Patricio Amengual.
[1] Cumpliendo diez años de su fundación, Emilio Filippi y otros miembros del equipo dejaron la revista para embarcarse en el proyecto del diario La Época, en enero de 1987, asumiendo como director, el periodista Abraham Santibáñez Martínez, quien en una ocasión fue encarcelado junto con otros periodistas.