[6] En la década 1960 fue construido un pabellón exterior diseñado por Nelly Grandal y José Scheps, conectado con el edificio principal.
[8] Vencido los 10 años, el casino pasó a un régimen directo de explotación por el Estado incluyendo sus instalaciones y equipamiento total.
[7] En 1968, Yolanda Manoukian se convirtió en la administradora del Hotel San Rafael, haciéndose cargo de la propiedad cuando estaba en remate por deudas fiscales.
[10] En los años setenta, con el Golpe de Estado que se transformaría en un régimen cívico-militar el San Rafael fue perdiendo atractivo y prestigio internacional.
Posteriormente la empresa propietaria le iniciaría un juicio al Estado por incumplimientos en la rescisión del contrato de arrendamiento.
[5] Ese mismo año, el Poder Judicial falló a favor de la firma en el juicio contra el Estado por US$ 2,6 millones.
En 2009, una asociación entre el grupo empresarial argentino Ingalfa y Hilton anunció que compraría el Hotel San Rafael y lo reconvertiría a cinco estrellas, con un plan a futuro de dos torres modernas, pero el proyecto se frustró.
[28][29] En 2021, el gobierno uruguayo otorgó al Grupo Cipriani la concesión para habilitar un casino y así acelerar el proyecto detenido,[30] la concesión del casino no sería viable sin la formalidad de la firma del italiano Giuseppe Cipriani, quien adujo estar en cuarentena por covid-19 en Dubái,[31][32] y que quien tiene una prórroga hasta el día 28 de enero.