Horacio Arredondo

El padre hizo construir una casa en un terreno que había adquirido en un remate, en la calle Garibaldi N° 405 esquina Montecaseros.

Relata en sus memorias que iba acompañado por el quintero Ambrosio, en tren de caballos.

En 1901, a causa de un pelotazo jugando al fútbol con sus compañeros, recibió un severo golpe en el ojo derecho.

Su médico de cabecera, el Dr. Luis Demicheri, aconsejó al padre que suspendiera sus estudios.

Al comprobar su gusto por éste, su progenitor le arrendó 600 cuadras, divididas en seis potreros, entre Suárez y Pando, sobre el Arroyo Las Piedritas.

En 1906, ya en Montevideo se incorporó al recientemente creado Ministerio de Trabajo e Industrias e Instrucción Pública, como auxiliar, pasando en un corto período a Secretario de Comisiones, demostrando capacidad para atender diecisiete comisiones a la vez.

Me propuse de inmediato tres objetivos; escribir su historia, realizar su restauración y contener las dunas con plantaciones apropiadas".

En 1919 logró interesar en sus proyectos al Presidente Baltasar Brum, con el que lo unía una gran amistad.

Al mismo tiempo llegaron pequeños árboles para las plantaciones destinadas a fijar las dunas que constantemente cubrían el monumento histórico.

En 1925, Arredondo fue designado Director Honorario del Museo Histórico Municipal de Montevideo, fundado por Alberto Gómez Ruano.

1930: los trabajos en la Fortaleza requieren la presencia permanente de Arredondo, trasladándose al lugar con su esposa e hijos.

Placa de reconocimiento a Horacio Arredondo en la puerta del Fuerte de San Miguel , departamento de Rocha , Uruguay .