A continuación vivió distintas etapas, surgiendo como ciudad importante en los albores y durante la dominación romana de Grecia.
Su líder, Pátreo (Πατρέας), fortaleció la muralla de Ároe y creó el primer núcleo organizado integrando los otros dos pueblos.
[1] Estrabón, en cambio, dice que Patras se había originado como ciudad tras la unión de siete comunidades.
La ciudad se consolidó como tal en mediados del siglo V a. C. La primera referencia histórica de Patras aparece en Heródoto.
Durante la guerra, en 419 a. C., Alcibíades convenció a los ciudadanos patrenses conectar la ciudad y su puerto por unas murallas (véase Muros Largos) al estilo ateniense, pero acudieron tropas de Sición, Corinto y otras ciudades a las que perjudicaba esta obra e impidieron que pudiera llevarse a cabo.
[7] En la Guerra Social (220–217 a. C.) Filipo V de Macedonia desembarcó en este puerto en su expedición al Peloponeso.
Marco Antonio pasó allí el invierno del 32-31 a. C. preparando la guerra contra Augusto.
Pausanias ubica en Patras santuarios y recintos sagrados dedicados a Apolo, Artemisa, Poseidón, Zeus, Atenea, Afrodita, Dindímene, Némesis, Serapis, Asclepio y Dioniso además de un santuario oracular de Deméter.
En 1406 se rebeló el heredero legítimo Stefano Zaccaria y tuvo el apoyo de Carlos I Tocco (cuñado de Centurión) y del déspota Teodoro II Paleólogo, pero no resistió.
Patras también fue amenazada por los bizantinos, pero finalmente se acordó una tregua que duró dos años.
Se le permitió la conservación de la baronía de Arcadia, pero el resto lo cedió como dote a la hija Caterina que se casaba con el emperador Tomás Paleólogo.