[2] El comportamiento belicoso de los caribes y su violenta migración hacia el norte causaron impacto.
[4] El territorio de Guyana quedaba en la demarcación portuguesa y fue ocupado por las Provincias Unidas de los Países Bajos, que comenzaron a explorar e instalarse en Guyana a finales del siglo XVI, estableciéndose Pomeroon (1581).
Tanto Francia como Gran Bretaña comenzaron a comerciar con los pueblos amerindios de las áreas costeras.
No obstante, la cultura guayanesa es homogénea en muchas formas, debido a la historia compartida, el matrimonio mixto, y otros factores.
La gente de estos orígenes diversos han coexistido pacíficamente para la mayor parte.
Los disturbios raciales entre indo y afroguyaneses estallaron en 1962-64, debido en gran parte a la intervención externa (véase Imperio Británico.)
El primer partido político moderno en Guyana fue el Partido Progresista Popular (People's Progressive Party), establecido el 1 de enero de 1950, con Forbes Burnham, un afroguyanés con educación en Gran Bretaña, como presidente; Dr. Cheddi Jagan, un indoguyanés educado en Estados Unidos, como segundo vicepresidente; y su esposa nacida en Estados Unidos, Janet Jagan, como secretaria general.
UU. unieron fuerzas para desestabilizar el paisaje político guyanés, con los Estados Unidos proporcionando inteligencia e infiltración a través del Instituto Americano para el Desarrollo del Libre Trabajo (American Institute for Free Labor Development), mientras los británicos trajeron la fuerza bruta.
Los británicos alternadamente se movieron para aplastar los altercados, o simplemente permitirles seguir su curso.
Se cree que agentes del presidente Burnham fueron los responsables de ambas muertes.
Aunque España seguía reclamando la región, los españoles no impugnaron el tratado porque estaban preocupados por las luchas de sus propias colonias por la independencia.
Por orden de las autoridades británicas, Schomburgk comenzó la frontera occidental de la Guayana Británica con Venezuela en la desembocadura del río Orinoco, aunque todos los mapas venezolanos mostraban el río Essequibo como frontera oriental del país.
Se iniciaron negociaciones entre Gran Bretaña y Venezuela sobre la frontera, pero las dos naciones no pudieron llegar a un compromiso.
A lo largo de los años, Venezuela presentó repetidas protestas y propuso un arbitraje, pero el gobierno británico no mostró interés.
Finalmente, Venezuela rompió relaciones diplomáticas con Gran Bretaña en 1887 y pidió ayuda a Estados Unidos.
Al principio, los británicos rechazaron la sugerencia de arbitraje del gobierno estadounidense, pero cuando el presidente Grover Cleveland amenazó con intervenir de acuerdo con la Doctrina Monroe, Gran Bretaña accedió a que un tribunal internacional arbitrara la frontera en 1897.
[7] Durante dos años, el tribunal, compuesto por dos británicos, dos estadounidenses y un ruso, estudió el caso en París (Francia).
Venezuela sólo recibió la desembocadura del río Orinoco y un corto tramo de la costa atlántica al este.
Aunque Venezuela no estaba satisfecha con la decisión, una comisión trazó una nueva frontera de acuerdo con la adjudicación, y ambas partes aceptaron el límite en 1905.