Como en su tiempo las aspiraciones socioeconómicas de la juventud extremeña estaban orientadas hacia las tierras del Nuevo Mundo; y deseando Alcocer cambiar de horizontes, solicitaba el permiso oficial para embarcarse hacia Indias.
La parte continental suramericana de la zona del mar Caribe, conocida entonces como Tierra Firme, (en lo referente al actual territorio venezolano) durante los primeros años del siglo XVI, esta comarca era visitada por esclavistas.
Pero como las estructuras sociopolíticas modificaban las trazas territoriales, poco tiempo iba a durar la paz y la tranquilidad en aquellos contornos que gobernaba Ampíes, porque parte de la comarca que hoy conforma el territorio venezolano, sería cedida por Carlos I de España a los Welser de Augsburgo, por ciertos compromisos prestatarios entre el rey y los banqueros germanos.
En agradecimiento a sus protectores, u obligado por su situación, se quedará casi tres años como esclavo entre los indios que lo han salvado.
Después que los de Alcocer descansaron algunos días y los agasajaron en el poblado indígena donde estaba Martínez Vegaso, los españoles partían rumbo a Coro llevándose al tal Martínez Vegaso.
Como particularmente los alemanes tenían el objetivo comercial de explotar al máximo la concesión que les había asignado Carlos I, sus métodos comerciales estaban orientados a sacar beneficiosos dividendos de todo lo que pudiera comercializarse.
En esta nueva etapa conquistadora, Alcocer fue un destacado soldado que intervino activamente en las fundaciones de Pamplona, Tocaima, Ibagué y Mariquita, se quedó en aquellos territorios y obtuvo merecidas recompensas.