Plinio el Viejo atrribuye la creación del buque de guerra heptere o septirreme (latín septiremis, griego antiguo ἑπτήρης/ heptērēs) a Alejandro Magno,: «desde la nave de siete filas hasta las de diez, según Mnesigitón, Alejandro Magno».
[1] Quinto Curcio Rufo lo corrobora, e informa de que el rey dio órdenes para cortar madera para 700 hepteres en el Monte Líbano,[2] para ser usadas en su proyecto de circunnavegación de la península arábiga y de África.
Demetrio Poliorcetes tuvo siete de estos barcos, construidos en Fenicia; posteriormente Ptolomeo II (c. 283–246 a. C.) construyó 36.
[3] Pirro de Epiro (c. 306–302 a. C. y 297–272 a. C.) también tuvo al menos un «siete filas», que fue capturado por los cartagineses y, finalmente, perdió en Milas.
[4] Presumiblemente, el heptere derivaba del hexere, con la adición de un remero colocado de pie en el nivel más bajo de la nave.