La Wehrmacht también incluía a la Kriegsmarine (Marina de Guerra) y la Luftwaffe (Arma Aérea).[2] Durante su período de expansión bajo Adolf Hitler, el Heer continuó desarrollando los conceptos surgidos durante la Primera Guerra Mundial, combinando elementos terrestres (Heer) y aéreos (Luftwaffe) en equipos de armas combinadas.[3] El Heer entró a la guerra con la mayoría de sus formaciones basándose en carretas y caballos para su transporte.[5] Sin embargo, mientras la guerra avanzaba, el OKW se encontró ejerciendo una creciente autoridad de mando directo sobre unidades militares, especialmente en occidente.El método adoptado por el OKW fue separar al comandante (Oberbefehlshaber des Heeres) del Heer del Mando Territorial (Heimatkriegsgebiet), encargando las responsabilidades de reclutamiento, entrenamiento, equipos y suministros al Mando Territorial.)), que en efecto eran, mandos para controlar el entrenamiento de las formaciones Panzer y Panzer Ligeras, las cuales no tenían distritos militares correspondientes, pero eran dotadas con reclutas y suministros por los distritos en donde se hallaban las guarniciones de origen del mando del cuerpo, o sus formaciones subordinadas.Más tarde la fuerza creció y dio origen al Panzerarmee Afrika (Ejército Blindado del África, en alemán).Entre los voluntarios extranjeros que sirvieron en la Wehrmacht durante la Segunda Guerra Mundial habían alemanes étnicos, holandeses, españoles y escandinavos, junto a personas de los países bálticos y los Balcanes que eran tanto voluntarios como reclutas.Esta "estrategia", denominada guerra relámpago, fue una doctrina operativa instrumental en los éxitos de las invasiones a Polonia y Francia.[cita requerida] Para la opinión pública, el Heer era y a veces es visto como un ejército de alta tecnología, ya que las nuevas tecnologías que fueron introducidas antes y durante la Segunda Guerra Mundial influenciaron el desarrollo de su doctrina táctica.Las otras divisiones seguirían basándose en caballos para remolcar cañones, otros equipos pesados y las carretas de suministros, mientras que los soldados marcharían o montarían bicicletas.Otras pérdidas sustanciales ocurrieron durante la derrota del 6º Ejército en Stalingrado en el invierno de 1942-1943.En 1944, Rommel argumentaba que ante la gran supremacía aérea anglo-estadounidense, ya no era posible emplear la táctica de "formaciones rápidas" concentradas porque no podían moverse lo suficientemente rápido para dirigirse a las ubicaciones amenazadas debido al corte de todas sus rutas por los cazabombarderos Aliados.Durante las últimas etapas de la guerra, los alemanes usaron ampliamente las ciudades fortificadas (llamadas Festungen), tales como Metz, Varsovia y Poznań.La Infantería ocuparía hasta cinco líneas de defensa, la primera solamente siendo puestos avanzados ligeramente defendidos.El historiador y periodista británico Max Hastings dijo en una entrevista radial de la emisora WGN Chicago "...no cabe duda que hombre a hombre, el Ejército alemán fue la mayor fuerza combativa de la Segunda Guerra Mundial".[cita requerida] Su visión también es compartida en su libro Overlord: D-Day and the Battle for Normandy.Siempre era adaptable, especialmente en los últimos años cuando se empezó a sentir la escasez de equipamiento".