A los dieciocho años, después de acabar el bachillerato, estudia un año en una localidad cercana a Chicago, donde entra en contacto con el mundo del teatro en la Mount Vernon Drama School.
Enseguida empiezan a ofrecerle, casi por casualidad, trabajos de actor en teatro y televisión.
Finalmente el teatro gana la partida a las artes plásticas y Gustavo abandona la carrera para formarse como actor.
En Nueva York protagoniza The Other Shoe y en Londres Lluvia en los zapatos.
Ha colaborado con muchos directores noveles, además de con directores consagrados como Luis García Berlanga, en Blasco Ibáñez, Manuel Gutiérrez Aragón, en El rey del río, o Mario Camus en La playa de los galgos.