[1] La principal línea de defensa rusa se extendía a lo largo del río Oká desde Kaluga al este hacia Nizhni Nóvgorod.
Resolvió las diferencias con sus hermanos y sus tropas comenzaron a moverse hacia el Oká.
Nesina[5] informa que el frente ruso se extendía a lo largo de 60 verstas (kilómetros), pero no especifica sus extremos.
Todos los intentos de cruzar el río fracasaron, en gran parte debido a las armas de fuego rusas y a que el río era lo suficientemente ancho como para hacer que las flechas tártaras fueran ineficaces.
Luego trató de mover secretamente sus tropas hasta un lugar llamado 'Opájov', pero fue detectado y bloqueado.
La estación avanzaba y ambos bandos sabía que una vez se congelara el río dejaría de ser una barrera.
Ajmed podía concentrar sus fuerzas y romper la delgada línea rusa en cualquier momento.
Su hijo Murtaza saqueó algunas aldeas al sur del Oká hasta que los rusos lo expulsaron.
Los caballos tártaros y las ovejas que conducían con ellos para comer habían ido acabándose gradualmente junto con el forraje local.
Incluso si no hubiera tal emboscada, tendría que luchar contra un ejército en una posición preparada o tratar de eludirla.
Tal vez el resultado más importante de la alianza ruso-crimea fue su efecto sobre Lituania.
En 1480-1515, Moscú (Rusia) se expandió desde su cuna Oká-Volga hacia el oeste hasta Smolensk y al suroeste a través del Ugrá y por el lado oeste del Oká hasta Nóvgorod-Severski.